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Finaliza la huelga en el Canal de Panamá

23/01/2012

Los obreros de la ampliación del Canal de Panamá, que mantenían una huelga desde el pasado lunes 16 de enero en demanda de aumento salarial, levantaron la medida de presión, después de llegar a un acuerdo con el Gobierno y el consorcio GUPC, a cargo de las obras.

La ministra de Trabajo y Desarrollo Laboral, Alma Cortés, que medió en el conflicto, afirmó que la huelga de los obreros del consorcio Grupo Unidos por el Canal (GUPC), que lidera la empresa española Sacyr Vallerhermoso, llegó a un acuerdo al filo de la madrugada de hoy, tras más de diez horas de negociaciones.

Con la modificación del decreto 3 del 4 de marzo de 1980 (el cual establece el salario mínimo para los trabajadores del área del Canal) se fijó un pago de 3,34 dólares por hora a los ayudantes y un incremento de 3,96 dólares para los trabajadores calificados en la ampliación de la vía acuática.

El actual salario mínimo para los obreros de la ampliación del Canal es de 2,90 dólares por hora, superior al salario mínimo que rige en el resto del territorio panameño.

A partir de la promulgación en La Gaceta Oficial del decreto que contiene el aumento, los trabajadores y el GUPC deben sentarse para negociar otros puntos que permitieron levantar el paro de seis días.

El GUPC, que construye un nuevo juego de esclusas en el Canal que permita el tránsito de buques más grandes, se comprometió a entregar las fichas del Seguro Social a los obreros, que forman parte del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción (Suntracs).

Además, el consorcio cambiará el software que calcula el salario de los obreros y cuyos errores fue uno de los motivos del paro.

Ambas partes acordaron crear una comisión que establecerá los mecanismos para resolver futuras fricciones, así como una prima por productividad que empezará a regir desde el 1 de febrero.

En un principio los dirigentes de los trabajadores de la ampliación del Canal pedían un aumento de 6 dólares por hora para los ayudantes y 10 para los trabajadores calificados, pero estas propuestas fueron bajando hasta llegar a un acuerdo con el gobierno.

Los obreros también se quejaron de que los trabajadores extranjeros devengan salarios más altos, sin precisar en qué categoría.

En las negociaciones, los obreros de la ampliación de la vía acuática también lograron que el consorcio GUPC, liderado por Sacyr e integrado por la italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña CUSA, les hiciera efectivo el pago de las horas extras y los domingos que habían trabajado.

El GUPC dijo que hizo una revisión de las nóminas para luego pagar a unos 6.000 trabajadores las diferencias adeudadas, que achacó a un error contable debido a un nuevo sistema de elaboración de los pagos a los empleados que está utilizando.

La paralización de las obras se inició el pasado lunes en Cocolí, en el sector del Pacífico, y en la provincia caribeña de Colón, donde se realizan los trabajos de las nuevas esclusas de la vía interoceánica.

Las autoridades gubernamentales no ha precisado a cuánto ascienden las pérdidas económicas por los seis días de huelga.

El GUPC cuenta con una fuerza laboral de 5.930 colaboradores directos, de los que 244 es personal extranjero especializado, que representa un 4 % del total de empleados de la empresa, cumpliendo “a cabalidad” con lo establecido en la ley.

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